Los Reyes Magos

Esta historia empieza el día cinco de enero, la noche mágica.Ese día como todos sabemos, es el día de los Reyes Magos.Es tradición dejar comida y leche a los Reyes y un cubo de agua para los camellos.Bueno pues, tras decir estas palabras, comienza la historia:


-¡Hola mamá!,¿que hay para desayunar?


-Huevos y bacon hijo.


-¡Genial!, gracias mamá.¿Sabes qué?


-No Fer dime.


-Estoy soñando lo bien que voy a dormir a la espera de los Reyes Magos.Y a la mañana siguiente, ir corriendo a despertaros e ir los tres ha ver los regalos que nos han dejado.


Todos los años, Fer escribe la carta a los Reyes y luego, cuando ya le han traído los regalos, siempre lleva alguno al colegio.Como todos nosotros:niños y niñas, jóvenes y adultos, vamos cumpliendo años, y cada vez nos vamos dando cuenta de algunas cosas increíbles.


Un día, a Fer le saltó una duda:


-¿Por qué mis padres siempre me dejan con la abuela y se van a comprar unos días antes de Navidad y de Reyes?


Esa duda le pudo durante mucho tiempo, hasta que decidió preguntar a sus padres.


-Mira hijo, algunas veces, los más pequeños tenéis unas ideas fantásticas, y, esta es una de ellas:
-Los Reyes no son quien tú crees.
La madre se quedó pensando un momento:
-Bueno sí que son ellos y te dejamos en casa de la abuela para mandarle la carta a los Reyes.
-¡A! Si solo es eso no veo la razón de por qué no me podéis llevar con vosotros...
-Las tradiciones hijo, las tradiciones.